martes, 17 de diciembre de 2013

MALICK EN BADLANDS


Por Beverly Walker. Este artículo apareció originalmente en Sight and Sound. Primavera 1975 . Derechos de autor: Sight and Sound. Traducción del inglés por Raúl Lino Villanueva.




Entrevistar a Terry Malick, productor, guionista y director de Badlands, resultó, al igual que su película, estar lleno de sorpresas idiosincrásicas. Mi lista preparada de preguntas fue cambiando de acuerdo a como Malick habló con pasión, convicción y, a veces, con ira de su película. Reconociendo que él "no podría haber pedido más" en términos de aceptación crítica, también indicó que la filmación fue dolorosa. Trabajar en la cúspide del verano de 1972, con una equipo no sindicalizado y poco dinero ($ 300.000, sin incluir algunos aplazamientos a los laboratorios y de los actores), Malick encontró todo tipo de problemas, desde dificultades en la financiación por la destrucción de todas las cámaras durante una secuencia de fuego. Finalmente, una vez finalizada, la Warner compró Badlands por un poco menos de un millón de dólares. Podría resultar un beneficio decente para ellos.




Hijo de un ejecutivo de una compañía petrolera, Malick creció en Texas y Oklahoma. Fue a Harvard y más tarde a Magdalen College de Oxford, como becario Rhodes. La filosofía estaba su programa de estudios, pero nunca completó su tesis - de hecho, su tema ni siquiera era aceptable para su Tutor Principal, Gilbert Ryle. Trabajos de verano lo sacaron de las cosechas de trigo en los Estados Unidos y Canadá, para trabajar en los campos petrolíferos y hendir  una mezcladora de cemento en una terminal ferroviaria, también a la labor periodística para Life, la revista Newsweek y el New Yorker. Fue enviado a Bolivia para observar el juicio a Regis Debray; el Che Guevara fue asesinado al día siguiente de su llegada. En 1968, fue nombrado profesor de filosofía durante un año en el MIT.

"No fui un buen maestro, no tenía la clase de abordaje que habría que tener en los estudiantes, por lo que decidí hacer algo. Las películas siempre me gustaron como una especie de manera de ingenuidad. Parecía lo menos improbable como carrera que cualquier otra cosa. Llegué a Los Angeles en el otoño de 1969 para estudiar en la AFI (American Film Institute), hice un cortometraje  llamado Lanton Mills (comedia, 17m). Encontré la AFI muy útil, es un lugar maravilloso. Mi esposa iba a la facultad de derecho y yo estuve trabajando durante un tiempo como re-escritor a medio tiempo en Drive, He Said,  cinco semanas en el predecesor de Dirty Harry en el momento cuando Brando iba a hacerlo con Irving Kershner dirigiendo. Cuando todos fueron despedidos por la Warner, el proyecto fue a Clint Eastwood. Reescribí Pocket Money y Deadhead Miles. Conseguí este trabajo a causa de un agente fenomenal, Mike Medavoy”.





"Al final de mi segundo año aquí, comencé a trabajar en Badlands. Escribí y, al mismo tiempo, desarrollé una especie de kit de ventas con diapositivas y cintas de vídeo de los actores, todos ellos con el fin de presentar a los inversionistas algo que haría parecer estar listos para grabar. Para mi sorpresa, no le prestaron demasiada atención. Invirtieron en la fe. Conseguí cerca de la mitad del dinero y Edward Pressman (productor ejecutivo) la otra mitad, empezamos en julio de 1972“.

"Los críticos hablaron sobre las influencias de la película y en la mayoría de los casos se hace referencia a películas que nunca había visto. Mis influencias fueron libros como The Hardy Boys, Swiss Family Robinson , Tom Sawyer , Huck Finn - . Todas implican un inocente en un drama sobre él o ella.  No pensé realmente acerca de esos libros antes de que hiciera el guión, pero es obvio para mí ahora. Nancy Drew, novela policíaca para niños de un niño detective, nunca pensé en ella”.

"Hay un poco de humor en la película, creo. No chistes. Miente en la subestima de Holly a su audiencia, por lo que van a estar interesados ​​o dispuestos a creer. (Ella parece a veces pensar en su narración como lo que se obtiene en los cursos audiovisuales en la escuela secundaria.) Cuando están cruzando las tierras baldías (badlands), en lugar de decirnos lo que está pasando entre Kit y ella misma, o algo de lo que nos gustaría y tendríamos que saber, ella describe lo que comía y a lo que sabía, A pesar de que podríamos estar planeando un viaje semejante y apreciar su experiencia, de esta manera".

“Ella es una chica típica del sur en su deseo de ayudar, de luchar contra la dura realidad; de no pensar demasiado sobre sí misma, lo que para ella sería indecoroso, pero siempre teniendo en cuenta las necesidades de los demás. Ella quiere que resulte de la mejor manera posible, pero es lo suficientemente escrupulosa a asumir la responsabilidad que de ninguna manera podría haber contribuido”.




Sugiero a Malick que la película ha sido criticada por patrocinar a Holly y su entorno. "Eso es una tontería. Yo crecí con gente como Kit y Holly. No veo ningún abismo entre ellos y yo. Una de las cosas que los actores y que yo solíamos hablar fue de nunca salirse de los personajes y darle un guiño a la audiencia, nunca bajar la guardia. Si mantienes tus manos fuera de los personajes tu aceptas cargar con eso, por lo menos usted no tiene defensa contra ellos. Lo que me parece condescendiente es que la gente no deja a los personajes solos, apilando la cubierta para ellos, no respetando su integridad, su diferencia”.

"La suñeridad de Holly es esencial para tomar su derecho. Ella no es indiferente a la muerte de su padre”.

(pérdida de la línea...) lágrimas, pero no iba a pensar en que le dice al respecto. No sería apropiado. Usted siempre debe sentir que en una gran parte de su experiencia ella no está incluida, porque ella tiene un fuerte, aunque fuera de lugar, sentido de la decencia. Usted podría preguntarse cómo alguien pasando por lo que ella pasa podría estar en absoluto preocupado por el decoro. Pero lo está. Y su tipo de cliché no comienza con las revistas “pulp”, como algunos críticos han sugerido. Existe en Nancy Drew y Tom Sawyer. No es la marca de una mente disminuida- pulp alimentada, estoy tratando de decir, sino la de la una inocente lejos de casa.  Cuando las personas expresan lo que es más importante para ellos, se trata a menudo de lugares comunes. Eso no los hace risibles, es algo tierno sobre ellos. Como si en la lucha por llegar a lo más personal sobre ellos sólo podían llegar a lo que es más público.






“Holly es en cierto modo el personaje más importante, por lo menos te da una idea de cómo es ella. Y me gustan más los personajes femeninos más que los hombres. Son más abiertas a las cosas que les rodea, más demostrativas. Kit, por otro lado, es un libro cerrado, no es un rasgo poco común en personas que han probado más de su cuota de amargura en la vida. Las películas se han ceñido al mito de que el sufrimiento te hace profundo. Que te inclina a decir cosas profundas. Que te construye el carácter y que es generalmente saludable. Que te enseña lecciones que no se olvidan. Personas que han sufrido salen en las películas con caras largas, pensativos, como si todo se hubiera derrumbado justo ayer. No es así en la vida real, sin embargo. No siempre. El sufrimiento puede hacerte un poco superficial y eso es  justo lo contrario a ser vulnerable, denso. Es este el tipo de efecto sobre Kit”.

"Kit no se ve el mismo como algo triste o miserable, sino como un tema de interés increíble, para sí y para las generaciones futuras. Al igual que Holly, como un niño, él sólo puede creer realmente en lo que está pasando dentro de él. Muerte, otro sentimiento de las personas, las consecuencias de sus acciones -son todas un tipo de abstracción para él. Él piensa de sí mismo como un sucesor de James Dean, un rebelde sin causa, cuando en realidad es más como un conservador Eisenhower. “Considera la opinión de la minoría", dice en la grabadora de cinta del hombre rico, "pero trata de llevarte bien con la opinión de la mayoría una vez aceptada”.  En realidad no cree nada de esto, pero él envidia a la gente que lo hace, que puede. Él quiere ser como ellos, como el hombre rico que encierra en el armario, el único hombre al que no mata, el único hombre con quien simpatiza, y el que menos necesita de simpatía. No es infrecuente que la gente que está en la últimas defiendan con más vigor las mismas reglas que ponen y que mantienen allí”.





"Y hay algo acerca de crecer en el medio oeste. No hay control sobre usted. La gente se imagina que es el tipo de lugar donde su comportamiento está bajo observación constante, donde realmente se tiene que seguir la línea. Tienen esa idea de Sinclair Lewis. Pero la gente realmente puede ser ignorada allí y caer en suelo infertil. Kit lo hizo, y él creció como una gran hierba venenosa".

"No creo que él es un personaje peculiar para su tiempo. Traté de mantener la década de 1950 a su mínima expresión. La nostalgia es un sentimiento poderoso, puede ahogarlo todo. Quería configurar la película como un cuento de hadas, fuera de tiempo, como La isla del tesoro. Esperaba que, entre otras cosas, tome un poco la definición fuera de la violencia, pero manteniendo aún su calidad de ensueño. Los libros para niños están llenos de violencia. Long John Silver le corta la garganta a su fiel tripulación. Kit y Holly llegan a pensar de sí mismos como estar viviendo en un cuento de hadas. Holly dice : "A veces deseaba poder conciliar el sueño y ser llevada a alguna tierra mágica, pero esto nunca sucedió".  Pero ella cree mucho que hay un lugar así y que ella debe confesarle que nunca llegó allí".







martes, 10 de diciembre de 2013

PRESENTACIÓN (EMOCIÓN)


Era setiembre u octubre de 1998. Vivía en Ginebra. Por toda la ciudad había publicidad de la película Salvar al soldado Ryan. La maquinaria hollywoodense puesta en marcha siempre es impresionante. Hasta en los baños públicos veías el afiche. Todos esos nombres de stars, productores y estudio asociados a un director muy conocido. Siempre me pregunté (me pregunto): “¿Hasta qué punto estos gringos nos toman por tontos?”. Fui a verla. Fui un tonto más. Muchos cineastas creen que lograr lágrimas de la gente es darle una emoción. Nada más falso.

Meses después, a finales de febrero de 1999, otra vez la maquinaria hollywoodense estaba en “pie de guerra”. Otra vez la invasión: stars, productores, un gran estudio hollywoodense…pero el director me era desconocido. La delgada línea roja, de un tal Terrence Malick, anunciaba su estreno… “¿Hasta qué punto estos gringos nos toman por tontos?”. Fui a verla para convencerme. Salí de la función tonto. Tonto porque no sabía si llorar o reír. Tonto porque por primera vez salía de la sala de cine sin saber que pensar sobre lo que había visto. Sin poder pensar. Intentaba recordar escenas y mi cuerpo respondía, mi estómago, mis piernas, electricidad. Fueron emociones tras emociones durante casi tres horas. Y era lo único que recordaba y sentía mientras caminaba de regreso a casa mirando sólo el suelo ginebrino. Emociones. No dormí. Me pregunté toda la noche que carajos estaba haciendo en la vida y con mi vida.  Quería más. Fui a verla noche tras noche. Doce veces más. Durante una de esas noches, la de mi cumpleaños, falleció Stanley Kubrick. Lloré. La película salió de cartelera y me sentí muerto y huérfano, sin Kubrick, sin más Malick.



Averigüé sobre este director desconocido para mí y encontré sólo dos películas más: Badlands y Days of Heaven. Dos obras maestras en veintiséis años! Dos obras que me impactaron tanto por su belleza visual como por la transmisión de emociones. Me enamoré del cine de Terrence Malick. Y la conjunción de tanta emoción me hizo tomar una decisión muy importante en mi vida: dejar todo lo que tenía, mi confort, mi trabajo, mis amigos, mi familia, todo, y estudiar cine. Hacer cine. Fabricar emociones. Comenzando el siglo lo intenté en Ginebra, en la Université de Génève, pero no me aceptaron. Más emociones. Conocí a una chica que luego se hizo mi novia. En el 2001(!) ella se preparaba para un MBA en París. “Ven conmigo”, me dijo, “estudia cine en París”…“Si los suizos que tienen a Godard no me han aceptado, menos los franceses” le respondí. “Por eso mismo, inténtalo con quienes lo inventaron”. Lo intenté. Lo logré (ella también). Ingresé a la escuela particular de cine más importante de Francia. La E.S.E.C. Y me fui a Paris, y me preparé con los grandes…y regresé a mi país. Gracias Europa por todo. Te dejo con tu guerra. Me voy a la mía.

Encontré muy poco, pero muy poco material de y sobre Terrence Malick en París. Malick es más celoso de su privacidad que el propio Kubrick, realmente, no hay muchas entrevistas ni de él ni de sus colaboradores.

Sabe hasta donde llega esa delgada línea…felizmente está filmando películas, una tras otra.

Leerán aquí algunas entrevistas a Terrence Malick, a sus colaboradores, actores, transcripciones, artículos destacados sobre sus películas y su verbo fílmico.

Este blog está destinado a una muy corta vida, pero me debo el hacerlo. Se lo debo. Mucho.