Que mejor que la
opinión de los propios actores con los que Terrence Malick ha trabajo para
conocer su sistema de rodaje, muy diferente al de otros realizadores:
RICHARD
GERE (Days of Heaven)
Cuándo la rodé tenía
26 años y cuando se estrenó, 28. Todo este letargo fue debido a que tuvimos que
volver a las localizaciones para rodar nuevamente la película entera durante
dos semanas, y encima, sin la presencia de los directores de fotografía, Néstor
Almendros y Haskell Wexler. (para THR)
BEN
AFFLECK (To The Wonder)
La experiencia me
resultó algo loca en el sentido de que no teníamos realmente diálogos, así que
no sabía lo que pasaba. Entonces, me di cuenta de que estaba acumulando colores
que quería usar para pintar en la sala de montaje. Mi carácter no hace
realmente gran cosa. Era difícil aprender como actor con él, porque Terry usa
actores de una diferente manera: él tendrá la cámara sobre tí y entonces, se
inclinará y se desplazará a un árbol, así que piensas: ¿Qué es más importante
en esto, yo o el árbol? Pero tú no le preguntas, porque no quieres saber la
respuesta.
Honestamente, tienes
que querer ver la película, es difícil encontrar cualquier diálogo. Es una
especie de poema. Si no quieres ver eso, debes irte. (para la revista GQ )
CHRISTOPHER
PLUMMER (The New World)
Amo muchas de las
películas de Malick pero el problema es que Terry necesita un guonista
desesperadamente. Insiste en sobreescribir hasta que suena terriblemente
pretencioso, y monta sus películas en una manera en que elimina a todo el mundo
de ellas. Está envuelto en tomas poéticas, que son maravillosas, como pinturas
todas ellas, pero se pierde en ellas y la historia queda difusa.
Particularmente en El nuevo mundo: la primera media hora del film es casi
mágica de mirar, pero entonces la historia comienza a decaer. Fui puesto en
todas las tomas posibles y, de repente, mi personaje no estaba en la escena en
la que pensaba en la sala de montaje, era muy extraño. Esto desequilibra
completamente todo. Nunca trabajaré con él de nuevo.
(para Indiewire)
SEAN
PENN (The Tree Of Life)
No encontré en
absoluto en la pantalla la emoción del guión, que es uno de los más magníficos
que he leído en mi vida. Una narrativa más clara y convencional habría ayudado
al film sin, en mi opinión, lesionar su belleza e impacto. Francamente, todavía
estoy intentando figurarme qué estoy haciendo allí y que se suponía que añado
en tal contexto. Es más, Terry nunca trató de explicármelo claramente. (para Indiewire)
ADRIEN
BRODY (The Thin Red Line)
Me mantuve concentrado
y profesional con el proyecto, lo di todo, para luego no recibir nada... en
cuando a ser testigo de mi propio trabajo. Fue muy desagradable porque había
comenzado a promocionar una película en la que prácticamente no aparecía.
JOHN
CUSACK (The Thin Red Line)
Él escribió un guión
basado en la novela, y hace un film basado en el guión, pero no está filmando
el guión. Está filmando la esencia del guión, y también está filmando la
película que está sobre la colina. Está intentando trascender el libro y el
guión y a sí mismo. Es un gato salvaje.